"Mujer, mujer no te olvida aquél que fue y te cantó...". Cómo hacerlo si con ese humilde pero simbólico hecho no sólo se manifiesta el cariño hacia la dama sino además reverdecen nuestras ilusiones y vuela el romanticismo de quienes atesoran el tiempo ido.
El pasado Sábado, por iniciativa de esa institución hermana que es Hijos y Amigos de San Isidro, volvieron a ganar la calle "los piqueteros de la nostalgia", como nos calificara nuestro malogrado amigo José Carlos Capparelli, juez de paz del partido, funcionario y autor del tango Bandoneón de mi ciudad (junto a Pedro Alberto Caroprese), para recuperar viejas tradiciones.
Esta ronda se desarrolló en el barrio sanisidrense de La Calabria y culminó en las instalaciones que gentilmente cedió el Centro de Jubilados, Pensionados y de la Tercera Edad de la calle Alberti, el primero en organizarse en el partido. Este Centro Cultural tuvo el orgullo no sólo de acompañar la convocatoria en calidad de público sino hacer su aporte fundamental con la participación de Rubén Fiorentino y Jorge Gatti, en calidad de Glosadores, y el cantor Héctor Moyano desplegando todo su arte.
Podríamos escribir una nota extensa y describir los pormenores de la mágica velada pero preferimos convidarlos con momentos (las fotos podes verlas en nuestro perfil de Facebook), pequeños fragmentos de una noche única que ya ansiamos desandar el próximo mes de diciembre...
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