lunes, 27 de junio de 2011

Cada año sale mejor

Por Rubén Fiorentino
En el marco de una gélida noche, se celebró el pasado sábado 25 de Junio el anual homenaje a Carlos Gardel organizado por la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos y Cultural “Dante Alighieri”. A setenta y seis años de los trágicos sucesos de Medellín la entidad sanisidrense celebró en el cine-teatro Stella Maris el clásico tributo al “Zorzal Criollo”, como ya es costumbre, desde hace diecinueve ininterrumpidos años.
La concurrencia era más que importante a pesar de la temperatura cuando el conductor del evento, Rafael Ruffet abriera la jornada con las palabras de bienvenida. Es de hacer notar la presencia en la sala de reconocidos difusores como Jorge Gatti, Jorge Bottino, Aníbal Hugo Gabarrella, a los que necesariamente deberíamos sumar al nombrado Ruffet y a quien estas líneas escribe que a pesar de no estar hoy en actividad se siente después de casi veinte años frente a un micrófono uno más de ellos. También se hicieron presentes autoridades como Teresita de Capparelli y representantes de entidades amigas de los organizadores como casi todas las que representan a la colectividad italiana en Zona Norte, Centros de Jubilados de Standard Electric y “Salvador Mario Prado”, Centro Cultural del Tango Zona Norte, Asociación “Hijos y Amigos de San Isidro”, Agrupación Histórico Cultural “El Cañón”, etc.
Inauguraron la jornada el conjunto “Las musas orilleras” que integran Sandra Antonucci y Andrea Bolloff. La primera pulsando con acierto su guitarra para que la otra nos regalara su bello y afinado canto. Obras tan disímiles como Quedémonos aquí, Gota de Lluvia, Pipistrela, Golondrinas, Cuando tú no estás y Lejana tierra mía que hicieron bajar de la platea los primeros aplausos de una noche que recién estaba en pañales.
Impensadamente me tocó acceder al escenario que alguna vez pisara “El morocho del Abasto” para hacer en nombre de la institución que presido mi recordación. Tras un breve diálogo con Ruffet leí a la concurrencia la Teoría sobre Gardel escrita por Héctor Negro y como diría Carlitos…”la barra completamente agradecida”. Mi alocución brindó el tiempo justo para que Luis Migliori y su formación se alistara del otro lado del telón para salir al ruedo. El huracán marcó la apertura de un rosario de composiciones instrumentales algunas e interpretadas con un excelente nivel otras en la voz de Daniel Alexis.
Así fueron surgiendo páginas que hicieron vibrar a la concurrencia, tales como Cuando llora la milonga, Melodía de arrabal, Por una cabeza, Y todavía te quiero, Nocturna, La última copa, Malena, Alucinado, Desde el alma, Pasional, Remembranzas, Selección de valses vieneses, Uno, Cambalache, Quejas de bandoneón hasta llegar al cierre obligado con el “Himno del Rio de la Plata”, La cumparsita, donde teclado, violín y bandoneones tuvieron oportunidad de brindar solos de aquellos instrumentos demostrando cada uno de ellos, un singular talento. Arreciaban los aplausos cuando Ruffet invitó a un breve intervalo. Concluido éste la reanudación acercó a la consideración del público al historiador del terruño, Jorge Tirigall que trazó una semblanza entre “El bronce que sonríe” y el crédito local Raúl Iriarte y luego a una juvenil formación, no obstante su vestimenta, instrumentos y estilo.
Era nada menos que La Antigua Fray Pimiento, conjunto formado por Laura Resua en flauta traversa, Gonzalo Dalairac en guitarra, Emiliano Stirling en clarinete y Matias Lovati en violín corneta a quienes debemos sumar a la pareja de bailarines formada por Adriana Benìtez y Adrián Griffero, y a un cantor, hecho como a la medida, Mauricio Díaz. Viejas melodías se adueñaron de la noche donde Gardel era el motivo convocante. Gallo ciego, El incendio, Orillas del Plata, El pillín, Buenos Aires Lágrimas y sonrisas, Don Juan, Gran Hotel Victoria y El porteñito fueron los títulos que el soberano supo escuchar en respetuoso silencio primero y premiar con aplausos y aclamaciones después.
Desde mi situación de improvisado cronista del espectáculo pude notar a los muchos que se levantaban de sus asientos y de pié vitoreaban a los artistas. En el curso de la jornada la entidad organizadora agasajó gentilmente a las damas participantes del espectáculo con sendos ramos de flores e hizo entrega de un reconocimiento en forma de plaqueta a la Sociedad Abruzzeza de San Isidro. El cierre nos encontró a todos pugnando por acercarnos a un muy solicitado Mario Calónico, mentor de estos ya tradicionales homenajes para transmitirle cuan brillante había sido el espectáculo ofrecido.

No hay comentarios.:

+Enlaces

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

- Día Nacional del Bandoneón -

- Día Nacional del Bandoneón -
El 11 de junio se celebra el "Día Nacional del Bandoneón" en homenaje a un nuevo aniversario del natalicio del mayor exponente de ese instrumento, Aníbal Carmelo Troilo o simplemente...Pichuco